Por Fernanda Rojas
El fin de semana pasado, sábado 30 de noviembre y domingo 1
de diciembre, se realizó en Gan Gan la
Feria de Actividades Productivas de la Meseta, “para celebrar lo
que nos ofrece la ñuke mapu, para valorar nuestro trabajo”. El encuentro de
pequeños productores y artesanos de la meseta central norte de la provincia del
Chubut fue una continuación del “Primer Foro de Actividades Verdaderamente
Productivas, a Escala Humana y para Beneficio de las Comunidades” que en junio
del año pasado organizara en Esquel, junto a otras asambleas de la provincia, la Asamblea de Vecinos
Autoconvocados de Esquel por el No a la Mina.
En este caso, la feria de Gan Gan resaltó la idiosincrasia y
las actividades productivas locales, poniendo de manifiesto que la meseta
central norte tiene mucha vida y que es necesario celebrarla mostrando sus
productos, su trabajo y su newen.
“Sabemos lo que sustenta la vida en nuestro territorio, lo
que apuntala nuestra economía, de qué vivimos y cómo podemos seguir creciendo,
mirando siempre nuestras raíces, el esfuerzo de nuestros antepasados. Desde
nuestras raíces profundas que no queremos olvidar, la meseta centro norte se
muestra con sus esfuerzos, trabajos, ideas, habilidades, productos, sus manos
creadoras…”, expresaba el díptico que invitaba a los pobladores y campesinos,
en su mayoría de las comunidades originarias mapuche-tehuelche, a participar
del encuentro.
Valorizar el trabajo cotidiano ancestral, con actividades
productivas que no dañan el territorio, era uno de los objetivos de esta Feria
de Actividades Productivas. “’La única posibilidad de desarrollo para la meseta
es la minería’, así lo decían, nosotros decimos que las posibilidades de desarrollo que tenemos aquí
son muchas y aquí las estamos mostrando, y habla de dignidad, habla de
territorio, habla de trabajo, de esas cosas que son nuestras y que con
incorporación de otras tecnologías, de otras ideas, se van fortaleciendo, se
van ampliando y así la vida sigue creciendo y se sigue desarrollando”, explicó
Ángel Callupil, uno de los organizadores de ENDEPA.
Callupil explicó que la Feria de Actividades Productivas de la Meseta superó las
expectativas ya que llegó más gente de la que habían previsto. Es de destacar
que tanto esta feria en Gan Gan como el Primer Foro de Actividades
Verdaderamente Productivas en Esquel son eventos que se organizan desde las
bases, sin intervención del Estado y que
con pocos recursos económicos pero mucho valor humano se logran espacios de
encuentro que demuestran que hay suficientes actividades productivas para las
comunidades locales y que no hace falta que se instalen las industrias
extractivistas que avasallan los territorios.
Luego de la ceniza y de varios años de sequía, el campo se
empieza a recuperar y los pobladores de la meseta celebraron la vida
reencontrándose y compartiendo los productos de la tierra y de sus manos. Como
una señal de agradecimiento de parte de la ñuke mapu (madre tierra), a medida
que avanzaba la tarde del sábado y seguía llegando gente a la feria, el cielo
azul dio paso a unas nubes cargadas de agua que, con varios chaparrones,
celebró el encuentro junto a las comunidades allí reunidas.
Hubo exposiciones, charlas y muestras y circuló
abundantemente la palabra durante los dos días de feria. Se mostraron
experiencias de asociativismo a través de la Cooperativa De
Vuelta al Campo de Paso de Indios en articulación con el INTA, también acompañó
el recientemente inaugurado Centro de Desarrollo Emprendedor de la localidad de
Telsen, que promueve actividades para facilitar el arraigo territorial, y
estuvo presente la Escuela Nº
63 de Chacay Oeste, entre otras instituciones. A los productores y artesanos de
la meseta se sumaron otros tantos de la costa -Puerto Madryn y Trelew- y de la
cordillera -Esquel y Epuyen-, y se propusieron maneras de articular para
optimizar la circulación y comercialización de productos y materias primas.
Asimismo, se acercaron a colaborar asambleístas del Foro Ambiental y Social de
Puerto Madryn y de la
Asamblea de Vecinos Autoconvocados de Esquel por el No a la Mina.
Esta feria “ha desatado cosas en los pobladores que tienen
que ver con la vida, con esa vida que pretende siempre arraigarse, que quiere
seguir mirando la huella que han dejado los antepasados, que dejaron los
mayores, que son los que porfiadamente se quedaron aquí, a pesar de lo que
decían del desierto, a pesar del despojo, de los desalojos, de tantas
injusticias, hoy están floreciendo muchas cosas que dicen ‘nosotros nos
queremos seguir quedando aquí y queremos vivir de esta manera”, concluyó
Callupil.
Se espera que en el futuro se realicen actividades similares
en otras localidades de Chubut, organizadas desde la ciudadanía y de manera
colectiva, para seguir intercambiando conocimientos y creando conciencia de las
posibilidades de auténtico desarrollo sustentable en la provincia a través del
uso racional y a escala humana de los bienes comunes.
Se puede encontrar más información en www.fapchubut.com.ar
0 Comentá esta nota:
Publicar un comentario